sábado, 26 de diciembre de 2015

(Sin titulo)




Ruge, una vez,
Luego grita incontables veces.
Eres el sonido de tu voz
Y que nadie, ni nada,
Te cambie.
El lenguaje ya es suficiente limitación.
Ruge, grita, gime.
Se lo que debas ser.

Luego, mátate

miércoles, 9 de diciembre de 2015

Nadie sino tú- Charles Bukowski


Nadie puede salvarte sino
tú mismo.
te verás una y otra vez
en situaciones
casi imposibles.
Intentarán una y otra vez
por medio de subterfugios, engaños o
por la fuerza
que renuncies, te des por vencido y/o mueras lentamente
por dentro.

Nadie puede salvarte sino
tú mismo
y será muy fácil desfallecer,
pero muy fácil,
pero no desfallezcas, no, no.
Limítate a mirarlos.
escucharlos.
¿Quieres ser así?
¿Un ser sin cara, sin mente,
sin corazón?
¿Quieres experimentar
la muerte antes de la muerte?

Nadie puede salvarte sino
tú mismo
y mereces salvarte.
no es una guerra fácil de ganar
pero si algo merece la pena ganar,
es esto.

Piénsalo.
Piensa en salvarte a ti mismo.
Tu parte espiritual.
La parte de tus entrañas.
Tu parte mágica y ebria.
Salvala.
No te unas a los muertos de espíritu.

Mantente
con buen talante y garbo
y al cabo,
si fuera necesario,
apuesta tu vida en plena refriega,
al carajo las probabilidades, al carajo
el precio.

Nadie puede salvarte sino
tú mismo.
¡Hazlo! ¡sálvate!
Entonces sabrás exactamente de
qué hablo.

jueves, 3 de diciembre de 2015

La larga espera.



Hasta donde he llegado
Que miedo llegar a los veinte años
Que miedo vivir entre los túneles
Malditos de la ciudad.
La historia me llevo aquí
No hay sonata que no quiera salvarme
Pero ¿cómo no voy a querer suicidarme?
Tengo veinte años, pero mi alma
Ya tiene cientos, miles de años.
Es pesada y recorrida, ¿cómo he aguantado tanto?
El miedo se disfraza de orgullo
Y las sombras me abrazan
Con un frío polar.
La vida es una nota musical
Estas tienen un final
La ultima tecla
La ultima cuerda
El ultimo tambor.
Haré de mí con una fugacidad
Que asuste al más malsano
De los vicios.
De este modo, el miedo,
De este modo, la vida.
Haré de mí ¿qué puedo hacer de lo que no existe?
Un aro de tela me espera en la penumbra,
Inerte, vacío, al molde con mi columna.
Un aro que se prende en fuego
Se desvanece en el ático
Donde mi alma espera para ser socorrida. 
Mi alma, ¿qué haré con el miedo?
¿Qué haré cuando el agua se vuelva hielo
Y las trompetas del viento amenacen
Con socavar mi cuerpo?
Los túneles tienen un final
Pero la larga espera,

Oh, la espera, ¿qué haré con la vida?

jueves, 19 de noviembre de 2015

Las voces.




Los ángeles, las voces, los demonios.
¿Alguna vez se imaginaron escuchar
Toda una sonata en su mente?
Seguro les dirán que son conflictos.
Necios, nos reímos de su necedad.
Las voces, un holocausto
Masivo de nuestra existencia.
Cuanta gloria hay en la muerte,
Pero no esta última muerte.
Una vigilia, el silencio.
Cuan oscuro estaba el cuarto donde yací
-dormido-
Nunca lo estuve.
Necios, mil veces necios.
Apreciemos el cántico maldito de los dioses.
Nada, ni siquiera las mariposas
Que revolotean entre tus entrañas
Y posan sobre tu carne viva,
Nada, maldita palabra.
La salvación no está en ti, está en tu mente.
Miren, observen, ¿de qué mierdas hablo?

martes, 17 de noviembre de 2015

Mi jodida alma.

Anahis.


Allá, en una lejana tierra
Donde los rieles del tren no llegan
Donde si vuelas te topas con
Obstáculos oscuros,
No los ves.

Allá en la lejanía
Hay una sombra,
Grande,
Maldita por los dioses,
Bendita por la humanidad.

Es libre y sus alas
Son tan grandes como
Las de Luzbel.

Mi amada, mi alma.
Una jaula no basta
Te abres paso entre
Los barrotes y escapas.

Eres libre y quien soy
Para cortarte ello.
Tu libertad no tiene nombre
Y, sin embargo,
El lenguaje insiste
En llamarte.

Mi alma,
Mi jodida alma,
Cuando regresarás a
Mi cuerpo.

jueves, 12 de noviembre de 2015

(Sin título)




Las sombras,
Las sombras
Que se dividen en dos
Y forman un horroroso
Baile demoníaco.
Mierda.

Vienen por mí.

lunes, 9 de noviembre de 2015

Diarios. Alejandra Pizarnik




El viento es un trozo de oxígeno disfrazado de fantasma, que vaga silbando una canción que nunca pasa de moda.


Virginia Woolf a su marido, al suicidarse.



Siento que voy a enloquecer de nuevo. Creo que no podemos pasar otra vez por una de esas épocas terribles. Y no puedo recuperarme esta vez. Comienzo a oír voces, y no puedo concentrarme. Así que hago lo que me parece lo mejor que puedo hacer. Tú me has dado la máxima felicidad posible. Has sido en todos los sentidos todo lo que cualquiera podría ser. Creo que dos personas no pueden ser más felices hasta que vino esta terrible enfermedad. No puedo luchar más. Sé que estoy arruinando tu vida, que sin mí tú podrás trabajar. Lo harás, lo sé. Ya ves que no puedo ni siquiera escribir esto adecuadamente. No puedo leer. Lo que quiero decir es que debo toda la felicidad de mi vida a ti. Has sido totalmente paciente conmigo e increíblemente bueno. Quiero decirlo —todo el mundo lo sabe. Si alguien podía haberme salvado habrías sido tú. Todo lo he perdido excepto la certeza de tu bondad. No puedo seguir arruinando tu vida durante más tiempo. No creo que dos personas pudieran ser más felices que lo que hemos sido tú y yo. 

***

I feel certain I am going mad again. I feel we can't go through another of those terrible times. And I shan't recover this time. I begin to hear voices, and I can't concentrate. So I am doing what seems the best thing to do. You have given me the greatest possible happiness. You have been in every way all that anyone could be. I don't think two people could have been happier till this terrible disease came. I can't fight any longer. I know that I am spoiling your life, that without me you could work. And you will I know. You see I can't even write properly. I can't read. What I want to say is I owe all the happiness of my life to you. You have been entirely patient with me and incredibly good. I want to say that everybody knows it. If anybody could have saved me it would have been you. Everything has gone from me but the certainty of your goodness. I can't go on spoiling your life any longer. I don't think two people could have been happier than we have been

viernes, 6 de noviembre de 2015

Conversación entre dos.

-  Mano, ¿alguna vez has logrado dejar tu mente en blanco? Ya sabes, como estos budistas, borrar incluso el hecho de respirar.
Pensamos, pensamos, pensamos. ¿Y que nos queda?
Una orgía en la cabeza, de emociones, de pensamientos, de insomnios acumulados… Es horrible

- Jajaja.- se ríe- Para eso es la meditación mano, para liberar la mente.

-  Meditación, es mierda. Meditas ¿para qué? Piensas en meditar y al final sigues pensando que meditas. Un largo Ohm. O que se yo, y ahí te quedas.
Horas pensando que ya no piensas en pensar. ¿Comprendes?
La única meditación valida es el mejor orgasmo del mundo, sobre todo el femenino. Y un buen tiro en la cabeza

- Jajaja.- se sigue riendo, ¿me toma el pelo?- Cada quien tiene distintas formas de llegar al catarsis mano.

- No me importa, para ser sincero, llegar a la catarsis. Solo dejar de pensar.
El pensar es la propia autodestrucción, lástima que aprendí a amar el pensar.
Nunca pienses, mano. Lo sano es ser ignorante. ¡JA!, mira cuantas estupideces digo.

- La ignorancia no es excusa, para poder soltar esa ira primero debes conocerla y luego arrearla, eso lo puedes lograr quizás con meditación.- me responde.

-  Si mañana cierro un negocio compro una de anís. ¿Compras el refresco?
Soltar ira... Yo no sé soltar ira. La ignorancia es el mejor arma que poseemos algunos - tú, yo- pero no sé aún si la usamos como deberíamos. Sueno mucho a quien conocemos, en parte lo sé. Pero la verdad es que deberíamos aprender a pensar menos y torturarnos menos.

-  No mano no puedo beber…- me interrumpe.

- Después de eso, será más fácil lograr perder muchas cosas.

-  Bueno mano disculpa lo cortante pero voy a dormir, debo estar activo mañana que descanses, ¡bless! Relajante y no te frustres. Nada bueno queda del desespero y recuerda, cabeza caliente no piensa.


-  Ya es tarde... Descansa.

jueves, 5 de noviembre de 2015

El silencio.



¿Puede alguien aplacar el silencio
Dentro de estas cuatro
Paredes de mi cerebro?
¿Pueden abrir la jaula?
La sombra solo apunta una dirección en concreto.
Los pilares. Los pilares, mi amada
Forjan una señal de anhelo de libertad.
Mi amada, el silencio
Se ha vuelto ruido
Y ya me agrada la soledad.
Incluso el buen vicio del sexo
El cigarrillo
Pasan a planos secundarios,
Un coño, un cigarrillo, silencio…
Y la sombra de los barrotes
Atrapándome entre tus placeres.
Lunática noche
El dulce anhelo se
Vuelve desespero.

martes, 3 de noviembre de 2015

La gran épica dantesca.




Salimos porque necesitamos llegar a nuestro destino del día, trabajo, estudio, vagabundería, putería, negocio, hamponaje, todos compartimos algo en común,ese transporte que nos batea un homerun directo al norte. No necesitamos más que unos cuantos bolívares sin fuerza que no soportan su propio pesa en papel para decidirnos a entrar al infierno diario de la buena patria. Esperamos por una unidad que vaya a menos de 80 Km/h, esas que al sacarles la mano se detienen y empiezan a vociferar el destino de la misma, jamás será tu destino propio, si vas al Big- Low se desvían a la Lara/Branger. Debes elegir bien, porque puedes acabar en el sur de una ciudad que ya no tiene puntos cardinales.

Si logras entrar a la unidad, es decir, entrar de verdad porque puedes tener la suerte de ir como para de zapatos de las guayas que le dan luz a la ciudad, guindando de las yemas de los dedos, con la punta del pie en la punta de la puerta y el resto al aire, como volando, no neguemos que da una sensación de adrenalina que te llena el alma de un miedo a caer y no morir. Entonces, logras entrar a la unidad, vas escalando puestos entre el pasillo, entre los más bizarros personajes de una ciudad condenada , superfluos seres humanos que no conviven entre ellos porque les mutilaron la lengua y la confianza. Vociferan pidiendo la parada de formas extrañas para todos menos para los ciudadanos -¡Por donde pueda!; ¡Déjalo!; ¡Aguanta, convi!; ¡Déjalo, mamagü...!- y luego vociferan una y otra vez su destino, el popular colector o cagapalo, es todo un circo dantesco de palabras brutas e indiferentes.

Si tienes la mala suerte de ser de baja estatura, te preparas para sentir el olor y el sudor del sobaco ajeno que si quisieras lo lames y no te dirán más que "Eres rolo 'e marico" te miran feo y si te vas más allá de las palabras seguro no pasas del semáforo, aquel que esta a 10 Km tiempo, sí, realmente esta a 100 metros pero de donde estas a él debes pasar unos 30 min. mientras los autos y demás unidades burlan las normas creadas para burlarlos a ellos. Además de la cantidad de seres mierdantes e inhumanos cuyas madres parieron tejas, cosa extraña, ya que duran horas bajo las llamas calcinantes del sol de la tarde para vender un par de Sussy's por un billete de esos de 100, de color marrón diarrea. ¿Agua? Dame 20 por ella. 

Si sales a punta de medio día, prepárate para la gloria de esta épica dantesca, intenta subirte aunque sea en el aire, intenta bajarte aunque sea por la ventana, prepara tu culo para aguantar el miedo de los vendedores de unidad que más que venderte te roban con delicadeza y sin armamento, cosa que todos agradecen porque es mejor una palabra que una bala, mierda. Los adolescente de 5 años que hablan a los gritos de como se cogieron a la menor del liceo, mientras se dan de puñaladas con el dedo, como indicando que si te "comes la luz" vas "pica'o". Dicen que se preparan para caer en el penal, pero en el barrio van co el culo apretados, el la unidad van con la voz en el aire, pero basta el vendedor para que se callen y se abra la atmósfera más pesada de la patria.

El trasporte publico es un mundo alterno que todos vivimos a diario, seas del norte, sur, este u oeste de la ciudad, atrévete a tomar un autobús de allá para acá. 
Registrado en Safe Creative

martes, 27 de octubre de 2015

Un buen viaje.

Nunca me ha gustado que me vean escribiendo, tal vez por eso espero la noche, tan silenciosa y sola. Yo, mis sombras, los grillos, la larga espera.

Nos divertimos al descubrir cosas nuevas, nos erotiza cuando unas cuerdas nos producen vibraciones mentales, cuando los versos nos follan los oídos y eyaculan poesía en la mente. Evitamos demostrar envidia por no reproducir la magia pero nos proclamamos dioses cuando en la oscuridad revolcamos el alma en ellos, el sudor, la oscuridad, el único y arrogante murmullo de un orgasmo. Dan ganas de vivir.

¿Cómo no podemos sentir ganas de vivir? Es ello, la música, la poesía, el arte -único y orgulloso- lo que nos mantiene, nos aleja del suicidio, de la amargura de soportar la gran jaula, es un viaje a lo "único" (al "uno"), la máxima expresión del alma. Un montón de idas sin venir, imposible de describir, el lenguaje...

La jaula. Las cuerdas rasgan la piel y la curten, los versos estropean la mente -susceptible- y la enloquecen. Hay jaulas contemporáneas, como las fronteras y los Estados con políticas degradantes, las mujeres con piernas de corbata y de ríos metafísicos.

Sin embargo de todas hay puertas abiertas, excepto de la jaula de la mente. Nunca, a diferencia de las anteriores, elegimos entrar en ellas (como si pudiéramos elegir) solo estamos. Y pensamos, creemos pensar, buscamos romper los barrotes y pensamos en acabar con ello por medio del suicidio ¿Nunca han pensado en él?

Un ente, olvidamos que los barrotes son abiertos y nos proclaman libertad, nos creemos dioses de nuevo y decidimos vivir. Incluso antes de nacer no decidimos vivir, nuestras madres se creen con el derecho de traernos, escupirnos al mundo, el peor mal que nos hicieron.

Pero la música, "Thus is the end", los versos, "La jaula se ha vuelto pájaro, ¿qué haré con el miedo?".

Estamos muertos, condenados, solo vinimos a hacer arte con la naturaleza, aprender de las orquestas de renacuajos, grillos, cigarras.

La música y la poesía son nuestros únicos y reales salvadores y aún así nos suicidamos en caladas taladrantes de humo y coños. Es todo un buen viaje. Registrado en Safe Creative

miércoles, 21 de octubre de 2015

Para morir



Montículos superficiales
Éxtasis de la muerte
El mejor reposo para
Las líneas que se van con el viento
Exaltado.

Resbalan entre ellos
El placer y la lujuria
De mis dedos.
Monte olivos o Sinaí
O volcán Vesubio
O Gran Roraima.
El turismo es indispensable
Para morir. 

sábado, 17 de octubre de 2015

Un mal viaje. La maquina de follar (Extracto) Bukowski




¿Nunca habéis pensado que el LSD y la televisión en color llegaron para nuestro consumo más o menos al mismo tiempo? Nos llega toda esta pulsación explorativa de color y ¿qué hacemos? Prohibimos una cosa y jodemos la otra. La televisión, desde luego, es inútil en las manos actuales; creo que no hay mucho que discutir al respecto.

One for all.




La posición perfecta,
Esbelta, como dos ramas
A punto de fusión,
Dos piernas hechas
Una para colocarla sobre la otra,
En un acto de valorada calamidad,
Coquetería atrevida,
Digna fusión de la putería
Y de las damas,
Es belleza digna de admirar.

jueves, 15 de octubre de 2015

Insomnio



Orgía de emociones
Insomnio lujurioso
¿Cuantos pecados quebrantamos esta noche?

Que bueno que no hay
Pecados que nos aten.
La prisión, la única,
Está entre tus piernas.

sábado, 10 de octubre de 2015

¡CRACK!

Se escucha al estallar de la burbuja de aire,
El escape sigiloso,
El momento cuando calienta el frío
Y quiebra los escalones de madera
Con el popular ¡Crack!,
Hijoputa estruendo en el placentero silencio
De la calmada sin razón.
¡Crack!, como tu fría indiferencia
Quiebra la madera de mi corazón,

Hijoputa sin razón.

lunes, 5 de octubre de 2015

Carta suicida.


Con andar equivocado mis piernas se desvían hacia una carretera de perdición, de sueño, de tristeza, con un andar desviado, la muerte asecha hasta  mi alma. Corren en un paso y caminan en un solo lugar,  muere su autómata función y ya solo actúan sin precisión; con andar desviado mis piernas se perdieron en el narcisismo desenfrenado de tu autoría, de tu belleza y de tus palabras amorosas.
Con un mirar sin pudor mi mirada desnudó tu mentira, con un mirar judicial mis ojos vieron desconfianza y condenaron tu amor demagógico.
Con tanteos de pasión y de lujuria fantasmal, mi cuerpo desmembró tu virtud y tu verdad, con unas piernas desviadas y una mirada judicial, mi tacto rompió en gotas de agua sobre tu piel ardiente de vergüenza, evaporando mi tacto y dejándome sin percepción de lo real.
Ya sin percepción, mi megalomanía por  Mozart y Paganini no reaviva mi razón ni mi conciencia. Beethoven, Schubert y Vivaldi también me abandonan y dejan a la suerte mi muerte, cada vez más cercana.

Con andar equivocado caigo en el abismo de tus manos y no enjuicio el sucio que las mancha y las torna obscuras, la megalomanía me ha abandonado y la muerte me ha encontrado, es frío el acero y caliente la sangre, con andar equivocado, con una mirada judicial, con un tacto evaporado y sin percepción de la realidad.

sábado, 3 de octubre de 2015

Capitulo VII. Rayuela. Julio Cortazar



  Toco tu boca, con un dedo toco el borde de tu boca, voy dibujándola como si saliera de mi mano, como si por primera vez tu boca se entreabriera, y me basta cerrar los ojos para deshacerlo todo y recomenzar, hago nacer cada vez la boca que deseo, la boca que mi mano elige y te dibuja en la cara, una boca elegida entre todas, con soberana libertad elegida por mí para dibujarla con mi mano por tu cara, y que por un azar que no busco comprender coincide exactamente con tu boca que sonríe por debajo de la que mi mano te dibuja.

     Me miras, de cerca me miras, cada vez más de cerca y entonces jugamos al cíclope, nos miramos cada vez más de cerca y nuestros ojos se agrandan, se acercan entre sí, se superponen y los cíclopes se miran, respirando confundidos, las bocas se encuentran y luchan tibiamente, mordiéndose con los labios, apoyando apenas la lengua en los dientes, jugando en sus recintos donde un aire pesado va y viene con un perfume viejo y un silencio. Entonces mis manos buscan hundirse en tu pelo, acariciar lentamente la profundidad de tu pelo mientras nos besamos como si tuviéramos la boca llena de flores o de peces, de movimientos vivos, de fragancia oscura. Y si nos mordemos el dolor es dulce, y si nos ahogamos en un breve y terrible absorber simultáneo del aliento, esa instantánea muerte es bella. Y hay una sola saliva y un solo sabor a fruta madura, y yo te siento temblar contra mí como una luna en el agua.

lunes, 28 de septiembre de 2015

Black Monday

Esta lluvia,
Este lunes negro,
Este teatro.
Todo planeado tan dramáticamente,
Tan Shakespeare, tétrico, malévolo.
Lo hermoso es que
Los truenos no hacen daño,
Pero los rayos son capaces
De partirte el cuerpo en dos,
Y entregarle tu alma a la nada,
A la oscuridad, a lo negro,

Sí, al lunes negro.

lunes, 21 de septiembre de 2015

(Sin nombre)

No sabemos articular,
Por medio del lenguaje, 
Sin la música nos llena o nos vacía.

viernes, 18 de septiembre de 2015

Sala de Psicopatología (Pizarnik)

Después de años en Europa
Quiero decir París, Saint-Tropez, Cap
St. Pierre, Provence, Florencia, Siena,
Roma, Capri, Ischia, San Sebastián,
Santillana del Mar, Marbella,
Segovia, Ávila, Santiago,
                   y tanto
                   y tanto
                   por no hablar de New York y el del West Village con rastros de muchachas estranguladas
-quiero que me estrangule un negro -dijo
-lo que querés es que te viole -dije (¡oh Sigmund! con
vos se acabaron los hombres del mercado matrimonial que frecuenté
en las mejores playas de Europa)
y como soy tan inteligente que ya no sirvo para nada,
y como he soñado tanto que ya no soy de este mundo,
aquí estoy, entre las inocentes almas de la sala 18,
persuadiéndome día a día
de que la sala, las almas puras y yo tenemos sentido, tenemos destino,
-una señora originaria del más oscuro barrio de un pueblo que no
figura en el mapa dice:
-El doctor me dijo que tengo problemas. Yo no sé. Yo Tengo algo
aquí (se toca las tetas) y unas ganas de llorar que mama mía.
 Nietzsche: "Esta noche tendré una madre o dejaré de ser."
 Strindberg: "El sol, madre, el sol."
 P. Eluard: "Hay que pegar a la madre mientras es joven."
 Sí, señora, la madre es un animal carnívoro que ama la vegetación
lujuriosa. A la hora que la parió abre las piernas, ignorante del sentido
de su posición destinada a dar a luz, a tierra, a fuego, a aire,
pero luego una quiere volver a entrar en esa maldita concha,
después de haber intentado nacerse sola sacando mi cabeza por mi
útero
(y como no puede, busco morir y entrar en la pestilente guarida de
la oculta ocultadora cuya función es ocultar)
hablo de la concha y hablo de la muerte,
todo es concha, yo he lamido conchas en varios países y sólo sentí
orgullo por mi virtuosismo -la mahtma gandhi del lengüeteo, la Ein-
stein de la mineta, la Reich del lengüetazo, la Reik del abrirse camino
entre pelos como de rabinos desaseados -¡oh el goce de la roña!
Ustedes, los mediquitos de la 18 son tiernos y hasta besan al leproso, pero
¿se casarían con el leproso?
Un instante de inmersión en lo bajo y en lo oscuro,
sí de eso son capaces,
pero luego viene la vocecita que acompaña a los jovencitos como ustedes:
-¿Podrías hacer un chiste con todo esto, no?
Y sí,
aquí en el Pirovano
hay almas que NO SABEN
por qué recibieron la visita de las desgracias.
Pretenden explicaciones lógicas los pobres pobrecitos, quieren que
la sala -verdadera pocilga- esté muy limpia, porque la roña les da terror, y el desorden, y la soledad de los días habitados por antiguos fantasmas emigrantes de las maravillosas e ilícitas pasiones de la
infancia.
Oh, he besado tantas pijas para encontrarme de repente en una sala
llena de carne de prisión donde las mujeres vienen y van hablando de la mejoría.
Pero
¿qué cosa curar?
Y ¿por dónde empezar a curar?
Es verdad que la psicoterapia en su forma exclusivamente verbal es casi tan bella como el suicidio.
Se habla.
Se amuebla el escenario vacío del silencio.
O, si hay silencio, éste se vuelve mensaje.
-¿Por qué está callada? ¿En qué piensa?
No pienso, al menos no ejecuto lo que llaman pensar. Asisto al inagotable fluir del murmullo. A veces -casi siempre- estoy humeda. Soy una perra, a pesar de Hegel. Quisiera un tipo con una pija así y cogerme a mí y dármela hasta que acabe viendo curanderos (que sin duda
me la chuparán) a fin de que me exorcisen y me procuren una buena
frigidez.
Húmeda.
Concha de corazón de criatura humana,
corazón que es un pequeño bebé inconsolable,
"como un niño de pecho he acallado mi alma" (Salmo)
Ignoro qué hago en la sala 18 salvo honrarla con mi presencia
prestigiosa (si me quisiera un poquito me ayudarían a anularla)
oh no es que quiera coquetear con la muerte
yo quiero solamente poner fin a esta agonía que se vuelve ridícula a
fuerza de prolongarse,
(Ridículamente te han adornado para este mundo -dice una voz
apiadada de mí)
Y
Que te encuentres con vos misma -dijo.
Y yo dije:
Para reunirme con el migo de conmigo y ser una sola y misma entidad con él tengo que matar al migo para que así se muera el con y, de
de este modo, anulados los contrarios, la dialéctica supliciante finaliza en
la fusión de los contrarios.
El suicidio determina
un cuchillo sin hoja
al que le falta el mango.
Entonces:
adiós sujeto y objeto,
todo se unifica como en otros tiempos, en el jardín de los cuentos
para niños lleno de arroyuelos de frescas aguas prenatales,
ese jardín es el centro del mundo, es el lugar de la cita, es el espacio
vuelto tiempo y el tiempo vuelto lugar, es el alto momento de la fusión
y del encuentro,
fuera del espacio profano en donde el Bien es sinónimo de evolución de sociedades de consumo,
y lejos de los enmierdantes simulacros de medir el tiempo median-
te relojes, calendarios y demás objetos hostiles,
lejos de las ciudades en las que se compran y se vende (oh, en ese jardín para la niña que fui, la pálida alucinada de los suburbios malsanos
por los que erraba del brazo de las sombras: niña, mi querida niña que
no has tenido madre (ni padre, es obvio)
De modo que arrastré mi culo hasta la sala 18,
en la que finjo creer que mi enfermedad de lejanía, de separación
de absoluta NO-ALIANZA con Ellos
-Ellos son todos y yo soy yo-
finjo, pues, que logro mejorar, finjo creer a estos muchachos de
buena voluntad (¡oh, los buenos sentimientos!) me podrán ayudar,
pero a veces -a menudo- los recontraputeo desde mis sombras in-
teriores que estos mediquillitos jamás sabrán conocer (la profundidad,
cuanto más profunda, más indecible) y los puteo por que evoco a mi
amado viejo, el Dr. Pichon R., tan hijo de puta como nunca lo será nin-
guno de los mediquitos (tan buenos, hélas!) de esta sala,
pero mi viejo se me muere y éstos hablan y, lo peor, éstos tienen
cuerpos nuevos, sanos (maldita palabra) en tanto mi viejo agoniza en la
miseria por no haber sabido ser un mierda práctico, por haber afron-
tado el terrible misterio que es la destrucción de un alma, por haber
hurgado en lo oculto como un pirata -no poco funesto pues las mone-
das de oro del inconsciente llevaban carne de ahorcado, y en un recin-
to lleno de espejos rotos y sal volcada-
viejo remaldito, especie de aborto pestífero de fantasmas sifilíticos,
cómo te adoro en tu tortuosidad solamente parecida a la mía,
y cabe decir que siempre desconfié de tu genio (no sos genial; sos
un saqueador y un plagiario) y a la vez te confié,
oh, es a vos que mi tesoro fue confiado,
te quiero tanto que mataría a todos estos médicos adolescentes para
darte a beber de su sangre y que vos vivas un minuto, un siglo más,
(vos, yo, a quienes la vida no nos merece)
Sala 18
cuando pienso en laborterapia me arrancaría los ojos en una casa en
ruinas y me los comería pensando en mis años de escritura continúa,
15 o 20 horas escribiendo sin cesar, aguzada por el demonio de las
analogías, tratando de configurar mi atroz materia verbal errante,
porque -oh viejo hermoso Sigmund Freud- la ciencia psicoanalítica se olvido la llave en algún lado:
abrir se abre
pero ¿cómo cerrar la herida?

El alma sufre sin tregua, sin piedad, y los malos médicos no restañan  la herida que supura.
El hombre está herido por una desgarradura que tal vez, o segura-
mente, le ha causado la vida que nos dan.
"Cambiar la vida" (Marx)
"Cambiar el hombre" (Rimbaud)
   
Freud:
"La pequeña A. está embellecida por la desobediencia", (Cartas...)
Freud: poeta trágico. Demasiado enamorado de la poesía clásica.

Sin duda, muchas claves las extrajo de "los filósofos de la naturaleza",
de "los románticos alemanes" y, sobre todo, de mi amadísimo Lichtenberg, el genial físico y matemático que escribía en su Diario cosas
como:
"Él le había puesto nombre a sus dos pantuflas"
Algo solo estaba, ¿no?
(Oh, Lichtenberg, pequeño jorobado, yo te hubiera amado!)
Y a Kierkegaard
Y a Dostoyevski
Y sobre todo a Kafka
a quien le paso lo que a mí, si bien el era púdico y casto
-"¿Qué hice del don del sexo?" -y yo soy una pajera como no exis-
te otra;
pero le paso (a Kafka) lo que a mí:
se separófue demasiado lejos en la soledad
y supo -tuvo que saber-
que de allí no se vuelve
se alejo -me alejé-
no por desprecio (claro es que nuestro orgullo es infernal)
sino porque una es extranjera
una es de otra parte,
ellos se casan,
procrean,
veranean,
tienen horarios,
no se asustan por la tenebrosa
ambigüedad del lenguaje
(no es lo mismo decir Buenas noches que decir Buenas noches)
  
El lenguaje
-yo no puedo más,
alma mía, pequeña inexistente,
decidíte;
te la picás o te quedás,
pero no me toques así,
con pavura, con confusión,
o te vas o te la picás,
yo, por mi parte, no puedo más.

Alejandra, querida y odiada.


Septiembre, 1972

"La noche soy y hemos perdido.
Así hablo yo, cobardes.
La noche ha caído y ya se ha pensado en todo"


"La oscura"


"¿Y por qué hablaba como si el silencio fuera u muro y las palabras colores destinados a cubrirlo? ¿Y quién dijo que se alimenta de música y no puede llorar?"

AP.

martes, 15 de septiembre de 2015

Crónica de un asalto venezolano




La neblina que se asoma,
Mientras las luciérnagas 
Que alumbran nuestras calles,
Intermitentes, explotan.



El frio intenso, como el fierro
Que a tu cien arropa.



Olvidas el instante que antecedía,
Para asegurarte que en el siguiente
Aun sigas con vida. 
Como un niño que algún día lloró,
Solo piensas lo peor. 



El reloj marca las dos,
La neblina llega y corta tu respiración,
El cigarro cae, mientras sueltas
La ultima calada,

Solo tres segundos le toma
Esparcir las cenizas,
Lo mismo que a tu vida salir con la brisa

lunes, 14 de septiembre de 2015

Como.


Como la larva que muere y se hace mariposa,
Como el cigarro que fumamos y se vuelve cenizas,
Como la gota de agua que muere en la tierra,
Como la montaña que se desmorona en un terremoto,
Como la abeja que muere en su primera picada,
Como la botella de alcohol que vaciamos hace dos noches.

Como las sabanas que absorben nuestro sudor,
Como la ropa que se desliza por nuestro cuerpo,
Como la mosca que nos vigila a la distancia,
Como el gemido que se esfuma entre tus labios,
Como las manos que deslizo por tus piernas.

Como el rugir de león,
Como el rayo que quiebra el cielo,
Como el perro que se esconde aterrorizado,
Como el ave que vuela hasta el infinito,
Como el placer de ver y sentir.

Estremezco mi felicidad junto a la tuya,
Como el colchón que se hunde bajo nuestro peso,
Como tus labios que sangran rojo carmesí,
Como tus manos que dibujan serpientes en mi espalda,
Placeres que se buscan entre tus piernas.

Como la serpiente que se recoge,
Como los músculos de mis piernas que se contraen,
Como los de tu abdomen que se contraen igual,
Como tu cintura que baila sobre la mía,
Como las estrellas que bailan en el cielo.

Como el clérigo que pide limosna,
Tú y yo pedimos limosnas al placer.
Como la montaña que se desmoronó
Me desmorono sobre tus senos.
Como el rayo que quebró el cielo
Tus gemidos quiebran mi cordura.

Masturbamos nuestros sentidos
Sobre el colchón que se hundió bajo nuestro peso
Y estremecemos la noche bajo el baile de las estrellas.
Como el te quiero que gemiste,
Como el yo también que recibiste.
Como cuando la muerte nos da el receso,

Y lo vivimos entre el algodón de las sabanas.